CACAO MENTAL

Vivimos obsesionados con el futuro. Esperamos a que todo llegue, a que todo cambie. ¿Qué pasará después? Es una pregunta que no tiene sentido y aun así, nos la planteamos a diario, pero ¿quién demonios lo sabe? Y por ello, ¿a quién coño le importa? ¿Acaso eso te impide avanzar o eres tú quien te lo impide? Compramos humo porque nos venden futuro. Joder, si nuestra vida es una promesa basada en el haré, lograré, iré. Construimos nuestro propio camino, o eso dicen, porque no decidimos libremente. Es triste, pero la capacidad de elegir por ti mismo es una puta ilusión, marcada por la coacción del tiempo y el espacio, adoctrinados por la sociedad.
Te voy a hacer una pregunta: ¿las decisiones que tomamos son nuestras o nos hacen pensar que son nuestras? ¿Realmente somos libres de elegir, de construir nuestro camino, somos dueños de nuestro destino? Te voy a poner un ejemplo. Aparentemente, la decisión de ir a la universidad es individual, pero desde otro punto de vista, es colectivo. Porque el ser humano es una construcción social: el hombre hace la sociedad y la sociedad hace al hombre. No podemos negar que pertenecemos a determinadas categorías sociales que nos hacen mirar la vida de una forma u otra. Es decir, estamos sometidos a unas categorías que condicionan nuestras decisiones. Por tanto, piensa, ¿la decisión de ir a la universidad es solo tuya?
Voy a poner otro ejemplo de "ilusión de libertad" un poco más macabro. El suicidio. Realmente, ¿esa decisión es individual o está marcada por la capacidad de una sociedad de integrar a sus miembros? En 1897 un sociólogo llamado Emile Durkheim hizo un estudio sobre este tema. Sus resultados fueron que se suicidan más hombres que mujeres, más solteros que casados... Con los datos que obtuvo, eliminó las variables biológicas y geográficas, y se centró en la sociológica. Llegó a la conclusión de que el suicidio depende de la capacidad de una sociedad para integrar a sus miembros. Por eso salieron esos resultados. Así que te lo preguntaré de nuevo, ¿la decisión del suicidio es solo tuya?
Deberíamos replantearnos las cosas, mirar con otros ojos, despegarnos de nuestras circunstancias personales y cuestionarnos la normalidad. Solo así seremos libres de elegir por nosotros mismos.